Es la habilidad para establecer contacto con
otras personas, relacionarse, e interactuar con ellas.
- La sensibilidad
especial para comprender sentimientos, pensamientos e interpretar la conducta
de los demás, captar estados de ánimo, sentir lo que otros sienten poniéndose
en su lugar. - La flexibilidad para entender otros puntos de vista. - La capacidad
para asumir diversos roles dentro de un grupo. - La aptitud para llegar a los
demás, asesorar, persuadir, liderar, negociar, actuar como mediador. - Es la
curiosidad e interés por distintos estilos de vida. - Es comunicarse en forma
efectiva, expresándose con claridad e interpretando adecuadamente los mensajes.
Relacionarse es sintonizar, con tiempo, sin apuros, relajados para sentir,
receptivos para escuchar, acoger y acompañar, dejando al otro en el centro, sin
quitar protagonismo. La empatía es la sensibilidad especial para comprender los
sentimientos, pensamientos e interpretar la conducta de los demás, para captar
estados de ánimo, sentir lo que otros sienten poniéndose en su lugar. Es la
actitud de extender las fronteras de uno mismo para dar espacio al otro, a su
forma de percibir, pensar y sentir. Si queremos comunicarnos, descubramos el
estilo de los demás, y el propio. Si coincidimos, hay armonía; si no
sintonizamos, en lugar de imponernos, es mejor entrar primero al mundo del
otro, percibirlo a su modo, para que la otra persona pueda luego entrar al
nuestro. Los primeros contactos se establecen acompasando los gestos, espejando
la postura, reflejando la respiración, imitando el ritmo y las palabras que usa
el interlocutor. El mundo es visto a través de los cristales personales; cada
cual ve la realidad en forma subjetiva de acuerdo a la experiencia vivida y al
propio marco de referencia. Lo que vemos depende del lugar desde donde lo
miremos y de lo que ponemos desde nuestra interioridad. Así, muchos malos
entendidos en la comunicación se producen por las diferentes maneras de
percibir e interpretar los mismos hechos; cuando cada uno, centrado en sí
mismo, tiene su propia visión, es incapaz de incluir en la relación la
perspectiva ajena. Empatizar es entrar en el marco de referencia del otro, ver
el mundo como él lo ve, y para ver con los ojos de quien mira es preciso
primero "sacarse los propios lentes", liberarse de prejuicios y
creencias. Comprender los pensamientos es entender lo que piensa quien se
expresa, interpretar sus palabras, su punto de vista. Suspender por un momento
el propio juicio, para dar lugar al otro, interpretando adecuadamente su
mensaje. Es aprender a escuchar lo que realmente dice la otra persona. Muchas
veces no se escucha con la intención de comprender sino para contestar y decir
lo que se piensa; o se puede estar con "cuerpo presente y mente
ausente"; escuchar ciertas partes de la conversación que nos interesan y
otras no. También se puede escuchar sólo las palabras literales y no lo que
realmente quiso decir quien las emitió, el verdadero significado que quiso
darle, y más allá de las palabras, es posible escuchar con el corazón, sentir
las emociones en el cuerpo, vibrar con ellas, conmoverse. Comprender los
sentimientos, para sentir su mundo como si fuera propio. Las personas con este
tipo de inteligencia se distinguen por la mayor capacidad para comprender y
relacionarse con los demás; crean empatía y pueden trabajar muy bien en equipo.
Tienen la sensibilidad suficiente para comprender y captar los estados
emocionales de otras personas, lo cual les permite interactuar bien con ellas,
comunicarse y motivarse. Con cierta frecuencia, llega hacer líderes de grupo ya
que tienen la capacidad de identificarse con los demás y los demás con ellos.
Otros
tipos de inteligencia que es importante impertinente mencionar son los
conceptos de inteligencia emocional y exitosa.
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